sábado, enero 21

Que dice mi mamá que siempre NO

O de cómo la burocracia mata tus sueños...


Me sentía feliz, tendría mi propia oficina y, aunque todos entraran y salieran, en teoría sería mía. También tendría mi tan anhelada silla giratoria y una computadora del año del caldo, pero con Internet. Sería una persona económicamente activa y estaría inscrita al Registro Federal de Contribuyentes… Insisto, me sentía feliz.

Pero poco me duró el gusto. Durante el primer día me quedó muy claro que mi trabajo consistiría, sencillamente, en transcribir notas a la computadora y mandarlas por fax. “Por algo se empieza”, pensé. Pero mi verdadero sufrimiento comenzó cuando me vi precisada a sentir el lentísimo transcurrir de las horas; en mi nuevo empleo no pasaba NADA. Ese lunes, si transcribí siete notas, fue mucho.

“Mañana será otro día”, pensé. Durante la segunda jornada laboral me dijeron que de vez en cuando tendría que acomodar la bodega, hacer la lista de consumibles y ordenar las cintas. “¡Chalessss!”, refunfuñé para mis adentros. “Pero no puede ser tan malo”, pensé, “es el empleo soñado, pagan regular por hacer NADA”. La palabra NADA comenzaba a apoderarse de mi existencia.

Larga era la lista de los compañeros que trabajaban en el Departamento de Síntesis y Monitoreo: Selene, Miguel, Joel, Luis, David, Martha, Luisa, Patricia, Santa, Horacio… Selene se iba y se supone que, en su lugar, yo me quedaría a cargo de la Oficina de Redacción. ¿Redacción dijeron?, yo la hubiera nombrado Oficina de TRANSCRIPCIÓN.

Las horas se extendían al infinito así que, para matar el tiempo, Selene y Martha me adiestraron en el difícil arte de ser burócrata:

*Trabajar lo menos posible.
*No malacostumbrar al “jefe”, es decir, trabajar despacio, despacito…
*Unirme de inmediato a algún bando, si es que quería sobrevivir.
*Aprovechar la situación y hacer uso indiscriminado del teléfono, la impresora y la fotocopiadora.
*Salirme de vez en cuando a “dar el rol”.
*Ocupar productivamente el tiempo laboral: escuchar música, chatear y hojear catálogos de Tupper Ware.

Día 3: El acabóse. Ya no podía ni con mi alma, me moría de aburrimiento; estaba decepcionada, abatida. Se supone que Joel entraba a las 3, creo que llegó a las cinco; medio mundo se encargó de “taparlo”. Por su parte, Martha se pasó el día platicando por Internet con un wey que le gustaba y Selene se encerró en una oficina para hablar por teléfono, y digo se encerró porque cerró bien la puerta.


Lo sé, el primer trabajo jamás es de ensueño; lo cierto es que yo ni siquiera trabajaba. El ambiente era tedioso y me frustraba observar la tremenda apatía: todos hacían únicamente lo mínimo, lo indispensable. Además, para acabarla, constantemente se hacían bromas “sexosas” y sumamente desagradables, sólo faltaba escuchar el clásico “pásame a tu hermana”; yo únicamente ponía cara de pocos amigos y me hacía de oídos sordos.

Así fue. La China na’ más no sirvió como burócrata. Dejé pasar la inigualable oportunidad de que me pagaran por hacerme mensa y medio pasar el rato. ¿Qué pasaría?, ¿aprendería algo?, ¿me volvería una “cara dura”?, ¿podría vivir sin aspirar a algo mejor? No lo supe ni lo quise averiguar, al cuarto día presenté mi renuncia.

Y cito por completo a Mark Renton:

“Choose life. Choose a job. Choose a career. Choose a family. Choose a fucking big television, Choose washing machines, cars, compact disc players, and electrical tin openers. Choose good health, low cholesterol and dental insurance. Choose fixed- interest mortgage repayments. Choose a starter home. Choose your friends. Choose leisure wear and matching luggage. Choose a three piece suite on hire purchase in a range of fucking fabrics. Choose DIY and wondering who you are on a Sunday morning. Choose sitting on that couch watching mind-numbing sprit- crushing game shows, stuffing fucking junk food into your mouth. Choose rotting away at the end of it all, pishing you last in a miserable home, nothing more than an embarrassment to the selfish, fucked-up brats you have spawned to replace yourself. Choose your future. Choose life... But why would I want to do a thing like that?...”

13 comentarios:

Cecilia Guadarrama dijo...

¿¿¿Qué pasó con esa resistencia???
Mi querida China. Te tengo una noticia. TODOS los trabajos que impliquen estar frente a una computadora, con un horario más o menos regular y que entrampen tus sagrados alimentos, son así.
La burocracia es un mal de esta tierra, hasta en las oficinas de redacción.
Te entiendo perfecto, cuando entré a la chamba en la que estoy ahora, me sentí igual; pero le vas agarrando el modo. Y con ello no quiero decir que le entres a las bromas, a desperdiciar los recursos de tu lugar de trabajo y a volverte un parásito, sino que diversifiques tus actividades; propón nuevas cosas, métodos más eficaces de chamba, sugiere cosas. Igual tus compañeros de lamebotas no te bajarán, pero si te sientes satisfecha, a la chingada los demás.
Es una lástima que hayas renunciado al cuarto día, pero tus razones y sobre todo, tus ganas de superarte, son las que te harán llegar más alto.
Suerte!
PD. Ya te "linquié" en mi blog.

Kaleidoscopico dijo...

hay mejor que te paguen por no aburrirte y no por estar ahi nomas...

Mandarina dijo...

Mi chinita usté´no se preocupe que hay más tiempo que vida y en ese lugar se estarán lamentando por haberte desaprovechado de esa manera.
Echemos pa´lante pues.
Te quiero.

Anónimo dijo...

Ese empleo era ORO MOLIDO. Ya te arrepentirás cuando no tengas dinero. Mis consejos valieron caca.

Además, ¿quien te dijo que iba ser el trabajo de tu vida? o ¿que te ibas a quedar ahí para siempre?

Penelope estoy sumamente molesto contigo.

Anónimo dijo...

Me pregunto... ¿qué pasó con mark renton?... si ves la película solamente, te quedas pensando "ese chavo después de echarse a correr hizo algo diferente, y vaya que si!!, hizo moulin rouge y La isla de los clones o no recuerdo como se llamaba, seguro lo bloquee después de la decepción. La cuestión es que siempre te tendrás que enfrentar a situaciones "injustas" pero... todo siempre es injusto para alguien. Eso si, habrá un día que encuentres algo más cercano a lo que quieres en ese momento, y será lo "mejor". Tal vez no era tu tiempo para ese trabajo… ¿para cual si?
ahí me avisas
van

es mi nombre Berenice dijo...

¿Qué pasó? ¿Renunciaste?

Sí, es culero hacer horas nalga; definitivamente, siempre hay algo mejor y si renunciaste, pus está muy bien, aprovecha que eres joven y aún puedes darte el lujo de hacerlo.

Anonimo dijo...

Kiubo Chinisima!

FELICIDADES
Felicidades por haber puesto un hasta qui y no haber sido complice de lo que a ti te molesta, por optar quedarte sin esa paga para quedarte con la satisfacción de que no eres un parásito más en esta sociedad donde la mayoría se conforma con lo mediocre y de baja categoria... muy bien chinita!!!!


Saludos

Chitiva dijo...

Amiga, no sabía que tenías nuevo empleo. No te preocupes estamos en una edad donde todavía nos podemos dar el lujo de cambiar de trabajo cuantas veces queramos.

El chiste es no dejarnos abatir por la idiosincracia de la sociedad reinante en muchos lugares.

un abrazo.

Chinísima dijo...

¡Wooow! Este post sí que ha creado controversia, me siento como Laura en América, jajaja.

¡Qué pase la desempleada!... Muy bien, agradezco TODOS los comentarios; TODOS los tomaré en cuenta.

¿Puedo decir algo? Nunca sabré sí la decisión que tomé fue la MEJOR (aunque para mí fue la correcta), sólo sé que con esta experiencia aprendí mucho, creo que me ayudó a madurar.

El dinero es importante, lo sé, da independencia. Tener un trabajo es importante, lo sé, te convierte en adulto.

Lo que me queda muy claro es que, si abandoné ese empleo, no fue para sentarme a llorar y lamentarme, sino para BUSCAR, BUSCAR y BUSCAR hasta ENCONTRAR.

Algo en mí se movió, fue como despertar, como tomar fuerzas... Nadie dijo que la vida es fácil y yo estoy dispuesta a enfrentar ese reto.

Gade Herrera dijo...

China, hubieras sido el enlace perfecto para saber si JuanRamón de la Fuente se tiraba a alguna secre en rectoría... chale...

Ni pex, bién por ti, que biueno que dejaste ese trabajo.. aunque hubieras aprovechado todas esas horas y horas y horas para hacer yoga, figuritas de migajón, bordar, etc etc etc.

Frodo dijo...

Yo hubiera aprovechado el tiempo muerto jugando ajedrez o dominó en yahoo juegos. Es lo que hago en mi chamba cuando no tengo que hacer y eso que no soy burócrata.
Que encuentres una chamba que te convenza pronto.

Frodo si es cara dura.

Anónimo dijo...

Que buena película y...mmmm
no tengo nada que decirte.

Anónimo dijo...

me encanta esa de mark renton siempre siempre .. me le he aprendido de memoria, pero no todo puede tenerse pues obvio no eres la unica a la que han tocado situacioens tan feas pero se ve que eres chingona y ya encontraras algo super chido
:D