sábado, junio 19

Común/extraordinario

Por la mañana. Se me hace tarde para llegar al trabajo, paro un taxi. El conductor y yo tratamos de entablar una conversación, sin mucho éxito, hasta que tocamos el tema del mundial, ja. Hablamos de una posible derrota contra Francia y de la millonada que ganan los futbolistas… hablamos de “el Chícharo”, de Dos Santos.


Me bajo en San Antonio Abad.


Chico nada feo: ¿Queda libre?

China: Ándele, ya agarró pasaje.

Taxista: Sí, ya ve, usted me dio suerte.


El chico nada feo me ayuda a bajar.


Ya por la tarde. De regreso del trabajo en el metro. Una mujer comienza a hablar, bueno, a gritar. Cuenta que tiene 68 años, que, mientras los pasajeros ya venimos de regreso a nuestras casas, ella todavía le seguirá un rato más. Ofrece dulces y su carisma llama mi atención.


Primero reparte los chicles y las paletas y hace un par de bromas. Unos devuelven la mercancía, otros se la quedan. Yo me acuerdo de mi abuela y le doy una moneda.


Mujer de 68 años: ¿Cuánto agarro?

China: Así está bien.

Mujer de 68 años: (Me da otra paleta y otro chicle.) Tenga, es para su mamá, por tener una hija con tanto amor.


Soy feliz mascando mi chicle de naranja… Al llegar a mi casa le entrego a doña Marisa lo que una desconocida le envió.

domingo, junio 13

Fan de los libros infantiles

Leí la historia de un niño muy moderno que se consigue un robot impostor. El androide ordena su cuarto, hace su tarea, va a la escuela… ¡genial!


Pensé en adquirir una réplica cibernética que lave y planche ropa, que barra y trapee, que lave el baño… y quizás que sepa algo de corrección de estilo y trabajo editorial. Pero luego reflexioné, la verdad es que no soportaría que a ella mi mamá la quisiera más...



Soy el robot, de Bernardo Fernández (Bef), con ilustraciones de Patricio Betteo. Editorial Almadía.

sábado, junio 5

Aires de grandeza

Andaba yo baboseando en una tienda departamental. Una vendedora me saluda:

"Bienvenida sea".

¡Ay, güey, en estas tiendas son taaaaan solemnes y sí que saben levantar la autoestima de los clientes!...

Miro una camiseta de United Colors of Benetton y medito un poco. Me río sola... caigo en cuenta. El asunto era más sencillo:

"Bienvenida a Sears".