domingo, septiembre 17

Déjenme si estoy llorando... Más drama ja-ja

Mi mamá dice que debería de complicarme menos la vida. Yo digo que tiene razón. Es sólo que mi naturaleza es como la de cualquier ser humano: compleja. Y no me resulta sencillo soportar la tristeza, saber que de nada sirve aferrarme a la posibilidad de estar con alguien a quien ya no me unen los lazos de ayer.

Quizás le temo a la soledad. Quizás grito para asustar mis miedos. Quizás… No creo estar enamorada, es como si no supiera lo que en realidad siento. Y esta es mi vida ahora… no puedo hacer nada al respecto… no puedo mirar atrás y anclarme a los recuerdos… No puedo vivir de lo que fue.

Él ya no quiere estar conmigo; no quiere ir al cine, ya no quiere escuchar música. No le importa lo que hago, ni lo que digo… ni lo que siento. Y ahora sueña con encontrar algo perfecto que, de tan perfecto, quizás es irreal. Ahora pretende confrontarme con algo que no es ni la mitad de verdadero.

Y no quiero estar con alguien a quien todo le da igual, no quiero estar con alguien que, pese a mi presencia, se siente tremendamente solo. Me niego a seguirme culpando… jamás le fallé. Traté de hacerlo parte de mi vida, pero no sirvió de nada; ya han sido demasiados intentos.

Es un viejo camino que yo ya había recorrido varias veces, hasta que lo conocí. Sé lo que siente. También sé que hay errores cuyo precio es muy alto, errores que nos arrebatan lo más preciado que tenemos: nuestro tiempo, nuestra vida. Y al final estamos tan solos como al principio… al final, de una u otra forma, tenemos que enfrentar nuestros temores.

Nadie puede querernos de un solo golpe… nadie que no sea capaz de vernos a los ojos y abrazarnos con fuerza. Nadie puede querernos si ese capítulo no está escrito en nuestro destino, y nosotros no tenemos el poder de forzar las situaciones. Es un milagro sencillo, natural, inexplicable… es, simplemente, un milagro.

Siempre estamos expuestos a que nos rompan el corazón, pero el dolor que esto provoca sólo nos enseña a crecer cuando es real, cuando toca nuestra existencia. Todo lo demás quizás resulta innecesario… todo lo demás son fantasmas que se tragan nuestros minutos, que nos roban posibilidades.

Mi mamá dice que debería complicarme menos la vida. Yo digo que tiene razón. Es sólo que a veces los recuerdos regresan con un propósito en especial… esta vez, al ver el reflejo de lo que fui, comprendo que puedo ser capaz de sobrellevar mis debilidades, esas que me hacen tan humana como cualquiera.



Viajar contigo
Alex Ubago

Esa noche de verano que te conocía
Ya quise besarte
Ahora cada noche sueño con tu melodía
Y puedo tocarte
Pero cuando me despierto
Se desvanece tu cuerpo
Me encantó soñar contigo

Me levanté una mañana
Tu melodía aún sonaba

Me vestí de traje
Y luego en el parque
Arranqué una flor
Me monté en el tren
Que según me dijeron
Llevaba tu corazón
Pero me quedé dormido
Y llegué hasta la última estación
Y ahí no había nadie
Tan sólo estaba yo

Ya no queda nada más
Que decirse adiós
Y eso me duele
Pienso que un hasta luego
Siempre es mejor
Cuando parece
Que la vía se termina
Y se separan nuestras vidas
Me encantó viajar contigo

Me levanté una mañana
Tu melodía aún sonaba

Me vestí de traje
Y luego en el parque
Arranqué una flor
Me monté en el tren
Que según me dijeron
Llevaba tu corazón
Pero me quedé dormido
Y llegué hasta la última estación
Y ahí no había nadie
Tan sólo estaba yo

5 comentarios:

Gade Herrera dijo...

Hay situaciones que, por más duras que parezcan, nos hacen crecer y ver que podemos seguir adelante.

Sé que saldrás adelante de esta racha. Échale ganas y te mando muchos abrazosferos.

(A poco no eso de abrazósferos suena como a una frase de Flanders, de los simpsons.)

Anónimo dijo...

Creo que sabìan de lo que estaban hablando...

y siempre fue un melodramòn!

Capi dijo...

Ánimo mi China y no se me sienta mal, hay lazos que por mas que duelan, hay que cortar, por que luego se cnvierten en círculos viciosos, si no, pregúnteme a mi. Besos.

Anónimo dijo...

Tremendo melodrama.

Ni Anaí en RBD se sentía tan mal.

Frodo dijo...

No le temas a la soledad, no es tan mala compañera.
Y mira, uno espera y a veces se siente desesperado y desesperanzado, pero lega un día y llega una persona y a la goma el pasado. Te lo digo con los pelos de la burra en la mano (es un dicho, no es que diga que CconR sea mi burrita).

El hobbit pela burras.