lunes, agosto 28

De la ardidez y sus efectos tardíos

Me caga la gente que pretende ser “inofensiva” y en realidad te puede partir la madre. Me caga. Me molesta que se hagan los desentendidos, como si sus acciones le pertenecieran a alguien más, como si en realidad no supieran lo que están haciendo. Te lastiman involuntariamente, nunca pretendieron causar ningún daño, esa nunca fue su intención…

Y mientras ya te amargaron el día, la semana o, en el peor de los casos, varios meses de tu vida. Son ellos: los “chinga quedito”, esos que trabajan por debajo del agua, esos que nunca serán capaces de dar la cara, ni de aceptar que en verdad entregan su máximo esfuerzo por hacerte sentir mal. Son la “amiga” envidiosa, la tipa ardida o el wey que te confunde en su confusión.

Siempre tienen algo amable que decir, algo en detrimento de tu autoestima, alguna “crítica constructiva” basada en su frustración y lo aburrido de su existencia. Y fingen que te quieren, que en verdad te aprecian; y hay algunos tan enfermos que hasta se la llegan a creer. Son peligrosos y dañinos.

Me caga esa gente que se roba tu confianza y luego te restriega en la cara tu ingenuidad. Me caga que al final ya no haya modo de recuperar el tiempo perdido. No soporto su indolencia… se cuelan en tu vida y después gozan con tu aflicción y no te quieren dejar ir. En la vida no te topas con muchos, pero los que se te atraviesan son manchados y difíciles de olvidar.

Me pregunto si todos tenemos el recuerdo de alguien así. Me pregunto si sólo yo me he topado con una “amiga” gandalla que me quiere “terapear”, o con un individuo que encontró su felicidad en hacerme desatinar una y otra vez. Me pregunto si esta es una de tantas cosas que, por alguna extraña razón, sólo me ocurren a mí.

Yo soy rete’ buena gente, pero en el momento en que les caigo en su teatrito a todos les aplico la misma: homicidio mental... los borro de mi memoria y dejan de existir; rehuyo de ellos ante cualquier amenaza de un posible encuentro. Ni modo que yo solita me ponga a modo para que me frieguen con mayor facilidad.

Es molesto que lleguen con sus “buenas intenciones” y que pretendan juzgar mi vida cuando la suya es un desmadre. Es intolerable que abusen de mi buena voluntad y metan el dedo en la llaga hasta que casi me retuerzo de dolor. Es inadmisible que por su cabecita pase la peregrina idea de que uno tiene que soportar sus pendejadas nada más porque sí.

Así son ellos, jamás cambian, a menos que sea de víctima; y luego se lamentan de que la vida los trata mal, de que “nadie los quiere”… Como diría mi amiga Dolores “y no es por ser mala onda, pero…”, pero ELLOS SE LO MERECEN. Como expresan los New Radicals: “You get what you give”.

Bendita sea la ley del Karma que nos ahorra incomodidades y pérdida de tiempo, bendito sea Dios que uno no tiene que andar desperdiciando el privilegio de la venganza con cualquiera…



Cuando piensas lo que piensas
Debajo del Promedio

Apoco crees que no
Me había dado cuenta
Que no sabías besar
Y quieres pretender
Que para ti no soy tan importante
Cuando en verdad lo soy

Pero aún así, siempre hay algo más
Que no sé de ti
Otra vez
Comenzó a llover
Sobre mí y no me mojo

Aunque tengas lo que quieres siempre pides más
Y al final de todo tú
No tienes nada que dar
Podrás vivir en tu mentira
Con tu manera de arruinarme el momento
Sólo con decir lo que piensas

Y sabes bien cómo
Hacerme sentir mal
Por lo que nos pasó
Juegas también a ser
La víctima del cuento
Que escribiste tú
En donde yo soy
El príncipe que nunca llegó
O tal vez decidió no intentar llegar…

No pienso tirar
La primera piedra
, tal vez,
Lleva mi nombre escrito
Otra vez
Comenzó a llover
Sobre mí y no me mojo

Aunque tengas lo que quieres siempre pides más
Y al final de todo tú
No tienes nada que dar
Podrás vivir en tu mentira
Con tu manera de arruinarme el momento
Sólo con decir lo que piensas

martes, agosto 22

Chikita y violenta

La noche un tanto lluviosa no pudo detener a los amantes de la música quienes, poco a poco, van llegando al Pasagüero para celebrar el Elegantly Wasted 2. Un viernes que en pocas horas se convertirá en sábado y que además ofrece a los visitantes la exposición Manos y Mundos, con obras de Bernardo Quinxaños.

Pasarela de modas que oscila entre reminiscencias de los 80’s y formalismos “fashion”; gente joven que, en su mayoría, rebasa los 25 años… todos reunidos a la expectativa de que incie la “tocada” de esta noche: Ventilader, Bill y el esperado regreso de Chikita Violenta, quienes llevan ya algunos meses de no presentarse en vivo.

La “chela de cortesía” equivale a una Modelo Light que no está muy buena, al menos eso dicen algunos de los presentes. No importa, para aquellos inconformes están las Heineken y tragos preparados con ron, vodka, whisky y tequila, eso sí, el consumidor debe tomar en cuenta que ese tipo de consumo se paga a parte.

Ventilader abre a eso de la media noche. Una buena propuesta que mezcla un poco de rock-pop con música electrónica, sin duda lo más atinado para comenzar la velada. Secuenciador y programaciones, base musical que parte de una computadora Mac. Surgen algunos problemas técnicos y Armando se me acerca para aclararme que “utilizar secuencias no es tan sencillo como parece”.

Los siguientes en aparecer son Bill, una banda cuyo cimiento es el rock. Se trata de un proyecto con claras influencias brit-poperas de las que se desprende un verdadero amor por el sintetizador. Escucho al vocalista y no dejo de pensar que pretende cantar como Brian Molko… Mientras tanto, la gente sigue en su ir y venir por la barra.

Tienen que ser ellos, no hay más. Los de Chikita Violenta comienzan a conectar y ecualizar sus instrumentos (tarea que les lleva varios minutos, sin duda es parte de su afán perfeccionista). Todos comienzan a acercarse al escenario y, antes de comenzar a tocar, Andrés (“el güero”) comenta lo felices que están de volver a tocar en vivo.

Sonidos que encienden y que llenan… instantes cargados de sensibilidad. Llama la atención su interacción con el público, esa es la enorme diferencia: Chikita Violenta toca para todos nosotros. Manos levantadas que se mueven de un lado a otro, aplausos y coros… el ritmo por todas partes y gritos al final de cada “rola”.

¡Qué noche!... una noche que ya es madrugada. El mejor sabor de boca y una extraña sensación: entre alegría y nostalgia. Sorprendente cierre, la probadita de un material discográfico que se antoja prometedor… La música en vivo es siempre mucho más sorprendente y cautivadora. Gracias al Pasagüero, gracias al Mums, a Cheech, al Güero, a RC y a Pacheco.

Me despido de los “chikitos violentos” y camino acompañada de mi hermano y de mi tía en busca de un taxi. Hoy soy más feliz que de costumbre y en mi cabeza no dejo de repetir “turn around”, una y otra vez…

viernes, agosto 18

Ley de Vida

“Esa Lupe es bien buena onda. Sí, ya ve que muchos quieren con ella… y no es que yo diga que sea… ¿cómo le diré?... así como que “bien fácil”. Hasta eso que no, digo, varios cuates quieren con ella, pero ella no les hace caso. Lo que pasa es que está guapa y es buena onda.

Pero ya ve, desde que tuvo a su hija ya no quiso volver a salir con nadie. ¿Cuántos años tiene?... creo que 32, ¿no? Sí, se hizo mamá bien joven, como a los 17 años, ya ve que ya mero le hace su fiesta de XV a su hija… Sí… Y supongo que también se va a hacer abuela muy joven…

Échele cuentas… que su hija se embarace pronto, despuecito de que cumpla sus XV, después de la fiesta y eso. Bueno, a lo mejor decide esperarse un poco más, como hasta los 17, a la edad de Lupe… Ya ve cómo son los jóvenes ahora, las muchachas se embarazan chamacas y ya ni qué hacerle.

El caso es que, si la hija de Lupe se embaraza como a los 17, ella será abuela como a los 34… Sí, la vida se va rápido, al rato los chavos crecen y uno ya hasta es abuelo. Pero esa es la ley de la vida… crecer, al rato juntarse con alguien, a lo mejor casarse, y tener que trabajar… No queda de otra…”


***Mensaje emitido por un tipo que platicaba con el chofer del microbús en que yo viajaba***



Fast Car
Tracy Chapman
***
You got a fast car
I want a ticket to anywhere
Maybe we make a deal
Maybe together we can get somewhere
***
Anyplace is better
Starting from zero got nothing to lose
Maybe we'll make something
But me myself I got nothing to prove
***
You got a fast car
And I got a plan to get us out of here
I been working at the convenience store
Managed to save just a little bit of money
We won't have to drive too far
Just 'cross the border and into the city
You and I can both get jobs
And finally see what it means to be living

***
You see my old man's got a problem
He live with the bottle that's the way it is
He says his body's too old for working
I say his body's too young to look like his
My mama went off and left him
She wanted more from life than he could give
I said somebody's got to take care of him
So I quit school and that's what I did

***
You got a fast car
But is it fast enough so we can fly away
We gotta make a decision
We leave tonight or live and die this way
***
I remember we were driving driving in your car
The speed so fast I felt like I was drunk
City lights lay out before us
And your arm felt nice wrapped 'round my shoulder
And I had a feeling that I belonged
And I had a feeling I could be someone, be someone, be someone
***
You got a fast car
And we go cruising to entertain ourselves
You still ain't got a job
And I work in a market as a checkout girl
I know things will get better
You'll find work and I'll get promoted
We'll move out of the shelter
Buy a big house and live in the suburbs
***
I remember we were driving driving in your car
The speed so fast I felt like I was drunk
City lights lay out before us
And your arm felt nice wrapped 'round my shoulder
And I had a feeling that I belonged
And I had a feeling I could be someone, be someone, be someone
***
You got a fast car
And I got a job that pays all our bills
You stay out drinking late at the bar
See more of your friends than you do of your kids
I'd always hoped for better
Thought maybe together you and me would find it
I got no plans I ain't going nowhere
So take your fast car and keep on driving
***
You got a fast car
But is it fast enough so you can fly away
You gotta make a decision
You leave tonight or live and die this way

sábado, agosto 5

Con tristeza

Mucha gente me dice que no vale la pena expresarme, que de todas formas nadie me va a escuchar. Pero yo soy terca, soy de esas personas que jamás se dan por vencidas, yo creo que aún existe un resquicio de sensatez en cada uno de nosotros.

Es gracioso como, desde que somos pequeños, nos enseñan a hacer distinciones tajantes. En la escuela nos forman por estaturas, nos ponen apodos según nuestros rasgos físicos, nos imprimen una especie de “sello” que nos distingue de los demás…

Más tarde, nos obligan a asumir las “demandas” que se derivan de la religión que profesamos. Y así nos dicen, por ejemplo, que si somos católicos no debemos tomarnos la molestia de conversar con un testigo de Jehová.

Se trata de una visión maniqueísta que con el tiempo se extiende a varios aspectos de nuestra vida cotidiana. Lo preocupante es que, justo en estos momentos, sale a relucir nuestra total falta de capacidad para convivir como seres humanos.

Así de sencillo: “estás conmigo o en mi contra”. Y ay de aquel que piense distinto, porque entonces es un “burgués”, un “fascista”, un individuo con una total falta de “conciencia de clase”. Ay de aquel que no apoye todas y cada una de las decisiones del grupo, porque entonces corre el riesgo de ser marginado.

“Tengo de dos sopas”, pero, ¿qué tal que elijo no probar ninguna de las dos? ¿Qué tal que elijo luchar de otra manera, qué tal que se me ocurre buscar una opción distinta? Quizás falle en el intento, pero al menos habré seguido el dictamen de mi conciencia.

Se nos olvida la historia, se nos olvida rápido… Se nos olvida que, gracias a líderes, religiones y fracciones partidistas la humanidad ha sido dividida por enormes muros, no sólo físicos, sino también mentales. Se nos olvida todo el sufrimiento, las muertes injustificadas y el dolor provocado por nuestra incapacidad para comprendernos mutuamente.

Con profunda tristeza he visto cómo la gente se pelea a media calle. Con un tanto de coraje he soportado insultos vía Internet, los cuales provienen de gente que ni siquiera me conoce, que no me da la cara, de gente que gasta horas de su vida en ofender a quienes no simpatizan con sus ideas.

¿La lucha por la democracia lo justifica? ¿La lucha por la democracia justifica el hecho de pisotear los derechos de terceros? ¿Esa misma lucha tiene la facultad totalitaria de silenciar a quienes no estamos de acuerdo en la forma de proceder de los simpatizantes de un político?

No, no estoy contenta con el ambiente que se está viviendo y, para aquellos que así lo quieran argumentar, les aclaro que tampoco soy “Calderonista”. Yo no pienso en partidos, sino en las prioridades que, urgentemente, tenemos que solucionar.

Los plantones y bloqueos no le ayudan en nada a esa señora que, bebé en brazos, vende dulces en una estación del metro, tampoco le ayudan a los niños que viven en la calle, ni a quienes están desesperados porque no encuentran un empleo para sostener a su familia.

No, no apoyo ese tipo de manifestaciones, pero eso no significa, de ninguna forma, que soy feliz viviendo en un país con desigualdades tan profundas. Es muy fácil confundirse y pensar con el hígado, es muy fácil generalizar: si no estoy con AMLO es porque soy una egoísta.

Poco saben de mi vida los de la “izquierda”, no saben que he dado clases desde que tenía casi 20 años, sin cobrar un centavo. Menos van a saber que mi padre defiende los derechos de los obreros de la empresa en la que trabaja, o que mi madre fue alfabetizadora. Hechos, esos han sido los ejemplos en mi familia.

Que se manifiesten, ese es su derecho, que luchen por sus ideales. Yo sólo pido que no me presionen, que no me obliguen, que no me orillen a aprobar sus acciones. Sólo les pido que no me señalen y que no me prejuzguen; les pido, sobre todo, que respeten a sus semejantes, más allá de las diferencias políticas.

Emparejado a la razón usemos nuestro corazón. No permitamos que nos utilicen, actuemos por voluntad propia, pero movidos por una “buena voluntad”. Sólo cuando seamos capaces de desarrollar nuestro sentido crítico podremos oponernos en el momento en que se nos de la orden de hacerle daño a alguien.



Imagine
John Lennon

ImagineImagine there's no heaven
It's easy if you try
No hell below us
Above us only sky
Imagine all the people
Living for today...
***
Imagine there's no countries
It isn't hard to do
Nothing to kill or die for
And no religion too
Imagine all the people
Living life in peace...
***
You may say I'm a dreamer
But I'm not the only one
I hope someday you'll join us
And the world will be as one
***
Imagine no possessions
I wonder if you can
No need for greed or hunger
A brotherhood of man
Imagine all the people
Sharing all the world...
***
You may say I'm a dreamer
But I'm not the only one
I hope someday you'll join us
And the world will live as one